El mural pintado en homenaje a Norberto "Pappo" Napolitano por el artista plástico Alejandro Amaro en el taller-sala de ensayo del músico, quedó tapado por la marquesina de un supermercado chino.
El lugar, devenido en autoservicio, supo ser el lugar en donde la leyenda del rock nacional solía ensayar con su banda, componer sus canciones y seguramente disfrutar de reuniones interminables, al ritmo del blues.
Ubicado en Remedios de Escalada al 2300, en el barrio porteño de La Paternal, el local que contaba con el retrato del "Carpo" como homenaje al músico, quedó totalmente tapado por los letreros del supermercado. Es que la familia del guitarrista no logró aclalarles a los inquilinos que el frente no podía ser modificado y cuando los vecinos lo advirtieron, ya era demasiado tarde.
Ahora quieren volver a contar con la obra, pero sería en el frente de un colegio, a metros del taller. El artista Alejandro Amaro, su autor, vive en Colombia pero está dispuesto a viajar a la Paternal para reproducir el mural en otra pared.
El mural había sido inaugurado en enero de 2007, casi dos años después de la muerte de Pappo. La obra ocupaba los ocho metros del frente del taller-sala de ensayo que Norberto "Pappo" Napolitano tenía en el barrio porteño de La Paternal. Llevó dos meses de trabajo, a cargo de su autor, Alejandro Amaro, para quien la intención del emprendimiento es que "la gente que pase por acá, pueda decirle ¡Grande Pappo!".
Este gran fresco incluía el rostro de Pappo, el triángulo de Pappo's Blues V y un reloj clavado en la hora 16, y fue uno de los pocos homenajes que fue autorizado por la familia del músico.
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