El 11 de noviembre pasado, luego de dar un show privado en el Whisky a Go Go de Los Ángeles, los integrantes originales de la banda Black Sabbath aseguraron que el 2012 sería el año del regreso. Una gira mundial que iniciaría en el Download Festival de Inglaterra y continuaría por otras ciudades europeas. Además, se confirmó que Rick Rubin trabajaría con la banda en la grabación de un nuevo disco.
El universo metal veía como sus dioses más primitivos anunciaban una resurrección histórica. Pero lo que no esperaban es que la propia historia le diría a la banda y sus fanáticos que dicho encuentro no podría hacerse realidad.
El cáncer que tiene en la lucha al guitarrista Tony Iommi y el conflicto contractual que supuso la petición del baterista Bill Ward, son los principales impedimentos para que la gira de Black Sabbath se lleve a cabo.
En un comunicado publicado en la cuenta oficial de la banda en Facebook, se anunció que la gira cambiará y ahora los conciertos presentarán únicamente a Ozzy Osbourne junto a músicos invitados.
El comunicado señala que Ozzy "realizará la mayoría de las fechas que Black Sabbath tenía previamente programadas, denominándose Ozzy & Friends, que contarán con la participación de músicos especiales para la ocasión incluyendo a Teery "Geezer" Butler, quien se unirá a la banda".
Algunos de los invitados serán Zakk Wylde (Black Label Society) y Slash. Mientras los trabajos de grabación con Rick Rubin continúan.
Por ahora a los fanáticos de la agrupación inglesa solo les queda rezar por una pronta recuperación de Iommi y el regreso de Ward, para tener a los "cuatro jinetes del apocalipsis" reunidos en su formación original.
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